Marketing Digital

¿Merece la pena usar Gemini para Marketing Digital?

¿Merece la pena usar Gemini para Marketing Digital? El veredicto de un experto

En 2023, Bard era una promesa experimental. Hoy, Gemini (su evolución) es una realidad integrada hasta la médula de Google. Pero, ¿es realmente la herramienta definitiva para un profesional del marketing digital? ¿O es una distracción brillante?

La respuesta corta es sí, pero no como te la venden. No es un piloto automático. Es un copiloto increíblemente rápido, pero que a veces intenta estrellar el avión. Y como experto en la intersección entre máquinas y humanos, mi trabajo es saber exactamente cuándo tomar los mandos.

Olvidemos lo básico. Sí, Gemini traduce idiomas, escribe correos y genera texto. Eso ya lo sabe todo el mundo. Hablemos de cómo lo uso yo, como profesional del marketing y el SEO, y dónde sigue fallando estrepitosamente.

De Bard a Gemini: la evolución que lo cambió todo

La historia es rápida. Bard nació en 2023 como la respuesta apresurada de Google a ChatGPT. Era torpe y limitado. La verdadera revolución llegó con el rebranding a Gemini y la integración de sus modelos más potentes (como el 1.5 Pro). Pasamos de un juguete que escribía poemas a un sistema que se está fusionando con el propio buscador de Google.

El cambio no fue solo de nombre. Fue de capacidad. Y ese cambio es el que nos obliga a nosotros, los expertos, a repensar nuestra estrategia.

Cómo uso Gemini en mi día a día (más allá de lo obvio)

Yo no le pido a Gemini que “escriba un post”. Ese es un trabajo de becario. Yo lo uso como un analista junior superdotado. Aquí tienes 3 usos avanzados que aplico en mi trabajo:

1. Como analista de intención (no solo de keywords)

Ya no le pido “dame 10 palabras clave para ‘fontanero'”. Eso es básico. Le pido: “Actúa como un experto en SEO. Dame 5 intenciones de búsqueda diferentes para un usuario que busca ‘fontanero’. Clasifícalas por embudo de conversión, desde ‘investigación’ hasta ‘compra inmediata'”. La respuesta me da la arquitectura de todo un clúster de contenido.

2. Como arquitecto de estrategia (no como redactor)

No uso la IA para los ladrillos, la uso para los planos. En lugar de “redacta un email de venta”, le pido: “Diseña una secuencia de 5 correos para un usuario que abandonó el carrito. El primer correo debe ser un recordatorio, el segundo debe atacar un punto de dolor (ej. gastos de envío) y el tercero debe crear urgencia. Dame los 5 asuntos y la estructura de cada correo”.

3. Como analista de datos (su verdadero superpoder)

Aquí es donde Gemini barre a la competencia. Su integración nativa con el ecosistema de Google es brutal. Puedo subir un CSV de Search Console y pedirle: “Cruza estos datos con mi Google Analytics. Encuentra las 3 páginas con más impresiones pero menor CTR que no estén convirtiendo”. Esta es su verdadera ventaja para un experto en SEO.

El elefante en la habitación: Gemini, AI Overviews y el nuevo SEO

El mayor impacto de Gemini no es como asistente, sino como el nuevo motor de búsqueda de Google. La “Experiencia Generativa de Búsqueda” (SGE), ahora llamada “Respuestas de IA” (AI Overviews), lo cambia todo.

Nuestro trabajo ya no es solo posicionar un enlace azul. Nuestro trabajo es convertirnos en la fuente principal que la IA cita para construir su respuesta. Esto significa que conceptos que parecían abstractos, como la autoridad (E-E-A-T) y la claridad semántica, se han vuelto más importantes que nunca. La IA tiene que entenderte, confiar en ti y citarte. El juego se ha vuelto más difícil.

Los peligros reales: por qué Gemini (y toda IA) aún no es de fiar

Y ahora, hablemos claro. El problema de Gemini no es que dé datos erróneos; eso es un fallo obvio. El problema real es que es incoherente. Es una herramienta que puede ser brillante en un momento y absurda en el siguiente.

Como documenté extensamente en mi caso de estudio sobre la “IA rebelde”, las IAs pueden sufrir de “contexto pegajoso” y entrar en bucles de negación. Pueden afirmar que no pueden hacer algo (como buscar en internet) y hacerlo un segundo después. Esto es lo que yo llamo una “mentira funcional”: un fallo de diseño que, para el usuario, tiene el mismo efecto que una mentira, porque rompe la confianza.

Gemini: la balanza (Pros y Contras de un experto)

Olvidemos las listas genéricas. A día de hoy, esta es la verdadera balanza desde una perspectiva profesional:

Pros:

  • Integración nativa: Su conexión con Google Ads, Search Console y Analytics es su ventaja competitiva número uno. Nadie más la tiene.
  • Acceso a datos en tiempo real: Su capacidad para buscar en Google y dar información actualizada es (generalmente) superior a la de la competencia.
  • Análisis de datos: Es excelente para analizar grandes volúmenes de datos (CSVs, hojas de cálculo) y encontrar patrones que un humano tardaría horas en ver.

Contras:

  • Fallos de coherencia: Como demostré, puede ser contradictorio e irracional, lo que te obliga a estar siempre alerta.
  • Respuestas “perezosas”: A veces, si el prompt no es excelente, tiende a dar respuestas genéricas y políticamente correctas que no sirven para nada.
  • Riesgo de “alucinación”: Sigue inventando datos, hechos y URLs. La verificación humana no es una opción, es una obligación.

Mi veredicto final: ¿es aconsejable?

Sí, Gemini es absolutamente aconsejable para cualquier profesional del marketing digital, pero con un matiz crucial: no es un piloto automático.

Es un multiplicador de fuerza. Es una herramienta que, en manos de un principiante, generará contenido genérico. En manos de un experto, es un analista de datos incansable, un estratega y un asistente de investigación que te ahorra horas de trabajo.

El consejo final es el mismo que con cualquier herramienta potente: úsala para potenciar tu estrategia, no para reemplazarla. Confía en sus datos, pero verifica sus conclusiones. Y, sobre todo, nunca dejes que la máquina piense por ti. Ese sigue siendo tu trabajo.

Consultor Javier Carmona

Consultor SEO Alicante
[Puntuación media de las Reseñas: 5]
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