Si usas Gmail con frecuencia en tu Mac, puede que te haya sorprendido descubrir que no existe una aplicación oficial de Gmail en el App Store de macOS. Sin embargo, Safari ofrece una función muy útil que permite crear una versión tipo “app” de Gmail mediante la opción “Añadir al Dock”.
Así, puedes tener Gmail en tu barra inferior como si fuera una aplicación nativa, con su icono propio y sin pestañas abiertas. Es una alternativa práctica y cómoda, pero con el tiempo puede presentar un fallo muy específico: no permite subir imágenes ni adjuntar archivos. En este artículo encontrarás la explicación completa y la solución definitiva para resolverlo.
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Gmail no cuenta con una aplicación oficial para ordenadores Mac. Esto lleva a muchos usuarios a mantener una pestaña de Gmail abierta constantemente en Safari, lo que puede ser incómodo si trabajas con varias ventanas. Para evitarlo, Safari incluye desde macOS Ventura una opción que convierte cualquier sitio web en una pseudoaplicación. Es decir, puedes abrir Gmail en su propia ventana, con icono, sin barra de direcciones y con acceso directo en el Dock.
Al abrirla, Gmail funciona exactamente igual que en Safari, con la ventaja de que se ejecuta en su propia ventana, sin pestañas ni distracciones. Pero esta función no deja de ser una capa encima del navegador. La “app” que has creado depende internamente de Safari, y con el tiempo puede acumular datos corruptos o conflictos de permisos que impiden subir archivos o imágenes.
Después de semanas o meses usando Gmail como app en el Dock, algunos usuarios descubren que ya no pueden adjuntar imágenes a sus correos. El comportamiento suele ser siempre el mismo:
Curiosamente, si abres Gmail desde una pestaña normal de Safari, el problema desaparece. Solo ocurre en la versión añadida al Dock. Esto demuestra que el fallo no está en Gmail ni en el navegador, sino en cómo macOS gestiona esa instancia específica de la app.
Cuando Safari crea una aplicación web a través de “Añadir al Dock”, genera un contenedor independiente dentro del sistema. Esa aplicación guarda su propio historial, caché, cookies y permisos. Con el tiempo, esa información puede acumular errores o bloqueos de acceso que impiden que Gmail abra correctamente el diálogo del sistema para elegir archivos.
En otras palabras, la app creada en el Dock se comporta como un navegador paralelo. Si su caché se daña o sus permisos no están actualizados, Gmail deja de poder leer el contenido de carpetas como Escritorio, Descargas o Documentos. Por eso, aunque Safari funcione perfectamente, la versión añadida al Dock puede fallar.
La buena noticia es que este error tiene una solución sencilla y rápida. No hace falta reinstalar nada ni tocar configuraciones avanzadas. El objetivo es limpiar los datos temporales de Safari, que también afectan a las aplicaciones creadas desde él, y forzar una recarga limpia de Gmail.
Antes de hacer cualquier cambio, asegúrate de que Gmail no está abierto ni en segundo plano. Para ello:
Esto garantiza que la aplicación deje de usar su caché y que los cambios surtan efecto.
Este proceso elimina todos los archivos temporales, cookies y scripts almacenados, incluyendo los que pertenecen a la versión de Gmail que tenías en el Dock. Es el paso más importante para desbloquear la función de adjuntar imágenes.
Una vez hecho el borrado, abre la aplicación de Gmail desde el Dock. El sistema cargará una versión totalmente limpia del sitio, como si fuera la primera vez que la usas. Ahora deberías poder adjuntar imágenes con normalidad.
En caso de que el fallo persista, continúa con el siguiente paso.
Si después de limpiar la caché el error continúa, significa que la aplicación que tenías en el Dock está corrupta. En ese caso, lo mejor es eliminarla por completo y crearla de nuevo:
Esta nueva versión heredará los permisos limpios y, normalmente, resolverá el problema de inmediato.
Mientras aplicas las soluciones anteriores, puedes usar Gmail desde una pestaña normal de Safari. Allí podrás adjuntar imágenes sin problema, ya que el navegador principal conserva todos los permisos del sistema. Es una alternativa temporal fiable mientras pruebas los pasos de limpieza.
Este error puede repetirse si usas la app de Gmail durante mucho tiempo sin borrar los datos de navegación. Para prevenirlo:
Siguiendo estos consejos, podrás mantener la aplicación de Gmail funcionando sin interrupciones durante meses.
Hay soluciones que circulan por foros y que pueden empeorar la situación. No las apliques sin saber exactamente lo que haces. Por ejemplo:
La limpieza manual desde el menú de Safari es suficiente. No hace falta nada más complicado.
Borrar el historial de Safari elimina también los datos asociados a las aplicaciones web creadas con él. Cuando vuelves a abrir la app de Gmail desde el Dock, el sistema la genera de nuevo con permisos actualizados. Por eso, en la práctica, es como reinstalar la aplicación sin tener que eliminarla manualmente.
Esto explica por qué muchos usuarios notan que Gmail “vuelve a la normalidad” inmediatamente después de limpiar el historial. La caché dañada se borra, se reestablece el acceso al sistema de archivos y la función de adjuntar vuelve a funcionar.
He tenido este mismo problema después de meses utilizando Gmail como aplicación añadida al Dock en mi Mac. Al principio pensé que era un error del propio Gmail, pero tras analizarlo vi que el origen estaba en la caché que Safari genera para esa versión del sitio. Borré el historial completo del navegador, reinicié la aplicación y el fallo desapareció al instante. Desde entonces, realizo una limpieza periódica para evitar que se acumulen datos corruptos.
Usar Gmail como app en el Dock me sigue pareciendo una forma excelente de trabajar: práctica, limpia y perfectamente integrada en macOS. Sin embargo, conviene entender que no es una aplicación nativa, sino una instancia del navegador con sus propios archivos temporales. Si se mantienen limpios y actualizados, funciona sin problemas. Si se descuida, pueden aparecer errores como el de la subida de imágenes.
La solución es sencilla: cerrar la app, borrar caché e historial desde Safari y volver a abrir Gmail. Si el fallo persiste, basta con eliminar la aplicación del Dock y crearla de nuevo. En cuestión de minutos todo vuelve a la normalidad.
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